lunes, 17 de septiembre de 2012

La rutina de otoño


Parece que el cole lleva un proceso de aprendizaje largo. Y yo lo entiendo. Para Alicia es como si el mundo suyo, el que conoce desde que nació, se hubiera venido abajo. Y empezara de cero otra vida. Amigos nuevos, horario nuevo, comer solita, echarse la siesta con sus compañeros…
Creo que hasta a mí me costaría un cambio de vida así. Y, además, son muchas horas.
La pobre se está adaptando lo mejor que puede. No había echado una sola lagrimita (Por lo menos delante de mí) hasta hoy. Cuando la he dejado se ha echado a llorar, y a mí me rompe el alma…
Poco a poco…
De momento, sólo veo sus fotos y flipo con lo mayor que está…


Los pitillos se los hemos comprado porque son fáciles de subir y bajar ella para ella. Que le toca ir al baño sola… Y las rayas, ya sabéis, un básico de mi armario y del de mis peques…

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